El Star Center Uni Ferrol volvió a castigar desde la línea exterior con 13 triples que fueron clave en el devenir del choque

Cada vez que vitorianas y gallegas se encuentran, el nivel de baloncesto que despliegan en pista sube de temperatura, hasta llenarnos de todas las emociones de este deporte. Con el buen sabor de boca del partido disputado en Esteiro en la primera vuelta, esta decimonovena jornada prometía. Y no defraudó. El primer cuarto fue de fuegos artificiales para las vitorianas, que en tromba y con Ane Aldalur en estado de gracia con cuatro triples casi consecutivos, protagonizaba los mejores minutos de Lacturale ART Araski en lo que vamos de temporada. A ese acierto al que se sumó Marta Tudanca en la larga distancia, le acompañó un juego coral defensivo, con ayudas a tiempo, rebote y contraataque, transiciones rápidas, juego explosivo como máxima expresión de lo que es el ADN de las alavesas. Una canasta de Irati Etxarri colocaba la máxima renta de 12 puntos para las locales (21-9). Pero esa tensión tuvo momentos de debilidad que Ferrol castigó. Una acertada Vanderwal (20 puntos) aprovechó varios despistes para dar oxígeno a su equipo (21-16). Dos triples de Cabrera saliendo del banquillo pusieron el partido en un puño (26-24). La enérgica salida de Van Den Adel a pista y su alianza con Silva, encendió la chispa de nuevo para sumar un parcial 7-0 y ampliar la diferencia (33-24). Pero Ferrol nunca se va de los partidos. Es su constancia y perseverancia la que hace que las pupilas de Lino López sepan aguantar con templanza los peores momentos para crecer. Y lo hizo el equipo gallego, no sólo desde el acierto con 13 triples, sino desde el oficio y talento de Bea Sánchez y una excelente María Araujo que supo trabajarse la zona, sacar ventaja como falso cinco para hacer daño en sus penetraciones fuera-dentro. Fue el momento de la tercera falta de Julie Forster y la lesión de Van Den Adel, con un pinchazo en su gemelo. Cuatro triples enseñaban el camino hacia vestuarios para un Ferrol que se ponían por delante al descanso (39-40).

La guerra deparaba pequeñas batallas, que cada equipo fue ganando en esas alternancias constantes. Umi Diallo se hizo ama y dueña de un juego interior con poca oposición defensiva. La canaria

sumó 16 puntos de oro para seguir creyendo en la victoria. Pero cada esfuerzo local era castigado desde el rebote ofensivo o con la talentosa Prince que, sin hacer ruido, pero con porcentajes por encima del 50 %, se marchó con 20 puntos, los mismos que Vanderwal. Así es Ferrol, poco vistoso pero tenaz en su juego, siempre incómodo para sus rivales.

Con todo por decidir tras 30 minutos plenos y de desgaste (58-60), quien mejor interpretara el guion y menos errores cometiera se llevaría la victoria. Y en esos pequeños detalles, las trampas del partido atraparon a Araski, que seguía sin saber parar el tiro exterior rival. Urieta confió en su pareja de bases Silva e Izaskun García. La venezolana como escolta fue la protagonista con ocho puntos en el último cuarto para un total de 15 y 26 de valoración, la mejor del partido. Punto arriba y abajo (72-73), cinco puntos consecutivos de Bea Sánchez, tras un 2+1, a menos de dos minutos, instalaron la preocupación. Silva contra todas, sumando robando y cometiendo una antideportiva tras una pérdida de Izaskun García. Por ahí, se fue un partido igualado durante 39 minutos. Volvió la mejor versión de Araski, al que le faltó ser más constante para materializar una victoria que deberá esperar para certificar la permanencia. Será complicado pensar que pueda llegar el miércoles ante el Perfumerías Avenida, de nuevo en Mendizorroza, pero la visita del líder siempre es una motivación.

Lacturale ART Araski 75 (21+18+19+17)

Aldalur 12, Diallo 16, Tudanca 11, Silva 15 Forster 8 –quinteto inicial

García, Molinuevo, Van den Adel 5, Agirre, Pardo 2

Star Center Uni Ferrol 81 ( 16+24+20+21)

Delgado, Sánchez 13, Prince 20, Araujo 12, Weisner 7 –quinteto inicial

Calvo 3, Cabrera 6, Vanderwal 20, Rodríguez

Árbitros: Jordi Domingo y Jaime Gómez

Asistencia: 800 personas en el pabellón Mendizorroza

Foto: Zuzenkipress