Tania Calvo lograba el séptimo puesto (34.209) en la clasificatoria matinal, con lo que se clasificaba para la final entre las ocho mejores, ya por la tarde.

Ya en la final, una ligera mejoría en tiempo (34.489) que no le suponía cambiar esa séptima plaza en un concurso en el que cada corredora que salía marcaba el mejor tiempo… salvo la última, la rusa Anastasiia Voinova, que se tenía que conformar con el bronce, tras su compatriota Daria Shmeleva, que ganaba el oro con 33.282, y la alemana Miriam Welte. “Estar en una final siempre es importante -valoraba Meliá-, por lo que es un buen balance. Pero además ha mejorado un puesto respecto al año pasado”.