Las hermanas Adriana y Beatriz Barrena se proclamaron campeonas de Álava tras vencer en la final a Marta Besga y Estíbaliz Sánchez. Inapelable, 6/2 y 6/1 tras una pelea decidida con poco equilibrio dado el nivel mostrado por las vencedoras, superiores en todo momento frente a las rivales, con una Beatriz Barrena –la hermana menor, casi tres años fuera del circuito- más suelta y sin nervios, que supo administrar las respuestas al juego rival sin tensión y con el tesón que acostumbra. La mayor, Adriana no tuvo que acudir tantas veces a socorrerla como hiciera en semifinales, “la auténtica prueba de fuego” según luego se vería durante el partido, en el que Beatriz pasó nervios y mostró la inseguridad propia del que no está a la tarea. 6/3 y 6/4 fue el resultado de la semifinal contra Teresa Arbulo y Miriam Besga, quienes pusieron en más apuros a las hermanas. En la final aprovecharon que Estíbaliz, una jugadora de “derechas” dura y eficiente jugaba en el lado contrario para buscarle las cosquillas a la pareja contraria. Besga y Sánchez habían dejado en la cuneta en semifinales a las hermanas Diana y Tania Santos